julio 01, 2023

José Fernández Álvarez (Jota Efe A)


A propósito de ...

ALDABAS, BOCALLAVES

Y OTROS HERRAJES


Cuando paseamos nuestras calles, con más o menos prisa, cuando nos desplazamos por sus aceras, junto a los inmuebles que las conforman, las más de las veces, vemos casas, edificios, sin percibir los muchos detalles que le confieren porte y distinción. Tal es el caso de las puertas. Si miramos con detenimiento, se transforma la calle en un museo, un escaparte de elementos decorativos y/o funcionales, por la variedad de objetos que se presentan ante nuestros ojos y que se encuentran colocados en las mismas. Un museo a recorrer distinguiendo sus aldabas, picaportes, manillas, tiradores, bocallaves, mirillas y otros herrajes.

 

Con la simple observación de estos elementos que actualmente se hallan fijados en las puertas y con un breve ejercicio de memoria podemos colegir la gran transformación que puede experimentar lo cotidiano. Este podría ser el primer aprendizaje que nos aportaría el hecho de pararse un segundo y mirar las cosas que nos rodean.

 

Los elementos a los que estoy haciendo referencia son el trabajo de maestros cerrajeros, fundidores, herreros, metalistas, carpinteros metálicos, etc., pues variados son los materiales con los que están fabricados: bronce, hierro fundido o colado, aleaciones de metal y baños que le dan brillo y durabilidad. El arte de la forja, la fundición, la herrería artística, el aspecto ornamental, la creatividad, la podemos observar en un variado repertorio que abarca desde sencillas formas simbólicas o zoomórficas, hasta incluso la recreación de figuras concretas.

 

Nuestra población Cabra, ha experimentado también aquella transformación quedando muy pocos ejemplos de puertas o portones con todo tipo de herrajes o algunos ciertamente singulares y de ellas daré cuenta. No obstante sí podemos apreciar en muchas puertas de la localidad algunos elementos en su mayoría exclusivamente decorativos careciendo de funcionalidad práctica pero que rememoran la utilidad de la que en su tiempo hicieran gala.

 

ALDABAS, LLAMADORES Y PICAPORTES (imagen 1)

La aldaba, palabra de origen árabe (al-dabba) es la pieza de hierro, bronce, aluminio u otro metal que se coloca en las puertas para llamar, golpeándolas con ella, si bien hoy día es más un mero elemento decorativo, pues a mediados del siglo pasado debido a la evolución tecnológica comenzaron a sustituirse por timbres eléctricos. Por la función de aviso, de llamada, es denominada en muchas partes como llamador, mientras que por su funcionamiento, esto es golpeando, tocando, picando, se las conoce también como picaporte.


Existe abundante literatura respecto al origen e implantación de las aldabas en las puertas, -a cuya lectura remito al lector-, y que se encuentra en las notas y enlaces de internet que me han sido útiles para esta colaboración.


Las aldabas, llamadores o picaportes, reliquias de una época pretérita, pueden adoptar diversas formas. En otros tiempos este elemento con su uso específico colocado en la puerta principal del edificio, reflejaba determinadas facetas del carácter de los moradores del mismo tanto por la forma como por el material empleado o por su valor artístico pues los forjadores hacían verdaderas obras de arte en función de lo que demandaban sus dueños para las casas donde irían destinadas las aldabas o picaportes. Eran piezas inseparables en todos los portillos y grandes puertas de entrada de ciertas casas de insignes nobles y palacios representativos de los poderes económico, político o religioso. Ya hace significación de ello el saber popular pues, ¡¡donde se pongan unas buenas aldabas!! …

En Cabra, las aldabas, llamadores o picaportes que existen, ya indicado que en su mayor parte se trata de piezas ornamentales, presentan no obstante una tipología variada que podemos clasificar atendiendo a la forma:

Formas geométricas: muy variadas a su vez, las hay de aro o argolla, alargadas (más ergonómica), de herradura, de bucle, etc.

Formas fálicas: como su nombre indica este tipo de aldabas o picaporte asumen forma de miembro viril (falo). La carga simbólica de estos elementos está relacionada con la capacidad fisiológica de la fertilidad en los humanos.

Formas de animales: pez, león, caballo, perro, serpiente, lagarto. Serpientes y lagartos han

tenido siempre un significado especial relacionado con la protección de la casa, la atracción de la suerte y otros aspectos de carácter esotérico y pagano.

Antropomórficas: figuras humanas, principalmente la cara o faz. A veces con argolla o con hexágono: bella dama o indio emplumado.

Quiméricas: por definición con formas irreales o que son producto de la imaginación.

La mano: expresa el simbolismo más hospitalario. Suele ser una mano con rasgos finos, con anillo o sin él, que sostiene lánguidamente un fruto, como si fuese a dejarlo caer desde la mano que se dispone a llamar a la puerta. Avisa de la actitud acogedora de los moradores de la casa. Se les suele llamar como picaporte de mano de Fátima. Las hay mano izquierda y derecha.

 

TIRADORES, ASAS, POMOS, MANILAS (imagen 2)

De las distintas acepciones de definición de cada uno de estos objetos, tirador, asa, pomo, manilla, manija o manillón, reduciéndolas a una sola y en relación con su colocación en las puertas, podemos decir con se trata de piezas, generalmente metálicas que, sujetadas por dos extremos en determinada altura de la puerta, realiza la función de asidero, facilitando con el empuje o tracción la apertura o cierre de aquella.


Igualmente las hay de muy variadas formas, destacando hoy día los pomos, que a diferencia de los tiradores asa, son redondos, pudiendo ser a su vez de diversos estilos: moderno, rústico, figurativo y formas: redondos (pomos), cuadrados, de lazo, alargados, de manija (también denominados picaportes). La singularidad común, es que el material con que están fabricados ha de resistir las inclemencias del tiempo, por ello al igual que las aldabas o llamadores, los tiradores, asas o pomos están realizados con bronce, hierro fundido o colado, o aleaciones de metal.


Este es quizá el elemento que no falta en casi ninguna puerta, si bien, en aquellas en las que no aparezca, es la llave al ser introducida y girada dentro de la cerradura la que realiza la función de tirador. En Cabra encontramos también diferentes tipos de tiradores, asas y pomos. No obstante, aún cuando con una función más específica que las aldabas o picaportes, estos elementos cumplen más bien otra misión cual es la decorativa u ornamental.  


PUERTAS TACHONADAS (imagen 3)

En la mayoría de los edificios religiosos y civiles antiguos nos encontramos con grandes puertas o portones, entendiendo por tal, la principal del palacio, residencia, iglesia o catedral, realizados con grandes gruesos y pesados tablones. Para aumentar su solidez se reforzaban añadiendo herrajes y cantoneras de hierro. Estos refuerzos son en la mayoría de los casos clavos o tachones, que se distribuyen por toda la superficie de la puerta de forma más o menos simétrica para proporcionar en este caso un toque estético y elegante a todo el conjunto, ejerciendo la atracción de transeúntes, visitantes o fieles.


Puede tratarse de simples clavos o tachones redondeados, eso sí, de determinado grosor, o con formas geométricas o incluso con arandelas decoradas con puntas de estrella. En algunos casos la simbología de los tachones expresa la genealogía histórica de las familias nobles que habitaron el edificio en épocas pretéritas. Pero la principal razón de su uso sobre todo en las que se colocan en la actualidad en casas particulares y que vemos en nuestra localidad de Cabra, es la de mostrar suntuosidad, elegancia, e incluso condición o abolengo, más unido a lo económico que a estirpe. 


OTROS HERRAJES (imagen 4)


Las puertas de las viviendas y edificios públicos civiles o religiosos requieren de otros elementos indispensables para su funcionamiento como los goznes, charnelas, bisagras o pernios, así como lo que podríamos considerar esencial como es el sistema de cerraje o cerradura. También podemos observar en algunas puertas la colocación de buzones de correos y otro elemento como es la mirilla. Otras puertas cuentan también con un tragaluz con herraje más o menos artístico y con o sin cristal. Y por último, podemos citar como herraje en puertas el chapado de parte de la misma sobre la madera.

-      El gozne, charnela, bisagra o pernio es el mecanismo para la apertura o cierre de una puerta, ventana o tapa para articular dos superficies; consiste en dos piezas metálicas que está articuladas por un eje común y se fijan en dos superficies separadas, generalmente una móvil y otra fija, en nuestro caso, puerta y pared, y permite el giro de una sobre la otra para juntar o separar las superficies. En realidad existen determinadas diferencias entre el gozne, la charnela, la bisagra o el pernio, si bien el mecanismo es el mismo, consistentes las diferencias principalmente en su sistema de fijación (desmontables o no) y cuál sea su uso (para grandes, medianas o pequeñas puertas, o ventanas).


-      La cerradura como he indicado es el elemento esencial en la puerta. El concepto de cerradura alude a un mecanismo metálico que permite cerrar algo a través de pestillos que hacen juego con una llave con la cual es imprescindible contar. Existe igualmente mucha literatura respecto a la historia de la cerradura y las llaves a través de los siglos hasta llegar a las actuales cerraduras electrónicas y de apertura retardada. En lo que respecta a esta colaboración cabe indicar que hoy día la mayor parte de las que encontramos en nuestra localidad utilizan llaves convencionales actuales, de determinado tamaño a colocar en un llavero que podemos llevar en nuestro bolsillo. Ello al margen de los sistemas de seguridad con que se cuente en la vivienda o edificio público. Existe un amplio catálogo de cerraduras, decoradas u ornamentadas,  con gran variedad de tamaños, formas y acabado. Muy lejos, eso sí, de aquellos bocallaves de los grandes portones y puertas rústicas de antaño con determinado simbolismo y amplio repertorio de signos visuales, a los cuales me referiré más adelante. 


-      En aquellas puertas en las que se fijan buzones de correos, se hacen interiormente, practicando una determinada hendidura en la madera y colocando como solución práctica y decorativa una pieza metálica generalmente basculante la cual se alza para la introducción de la correspondencia. En muchos casos este elemento lleva escrita la palabra “correos” o el símbolo o logo de esta Sociedad Estatal.


-      Casi todas las puertas de interior, esto es, las de los pisos, disponen de una sencilla mirilla como elemento de seguridad vital y protección del hogar ya que permite saber al morador de la vivienda quién se encuentra al otro lado de la entrada. Pero en referencia a las puertas de exterior, casi no se usa este elemento bien porque la puerta quede distante de la reja de entrada, bien porque se disponga de visor electrónico en la puerta u otras razones. No obstante existen en Cabra algunas, muy pocas excepciones y las más de ellas no cumplen precisamente esa función de mirar a través de, sino que igualmente se trata de un elemento meramente decorativo.

-    Algunas puertas, cuentan con un tragaluz, esto es, una especie de ventana o vano practicada en la parte superior y decorada las más de las veces con herrería figurativa o con forma de rosetón. Su función está en la palabra, esto es, se practica para que penetre la luz por aquella hendidura de determinado tamaño proporcionando a la habitación, portal o zaguán luminosidad del exterior.


-    Otro elemento menos común, aun cuando no se traje de herraje propiamente dicho, que también aparece en algunas puertas de nuestra localidad, es el chapado de la parte inferior de la puerta de madera. Su utilidad parece obvia, cual puede ser la de proteger la madera del ambiente exterior. En algunos casos este chapado es más o menos artístico por lo que he querido incluirlo en esta relación de herrajes en puertas.


BOCALLAVES (imagen 5)


Las bocallaves son chapas, generalmente de hierro, situadas alrededor del agujero donde se introduce la llave, con el fin de proteger esa zona de rozaduras a causa del uso y que, en muchas ocasiones, son verdaderas obras de arte que decoran y adornan bellamente puertas antiguas o no tan antiguas. Algunas son de factura muy sencilla en su ejecución, otras en cambio, las que más nos interesan, realmente muy elaboradas y llenas de simbolismo. En muchos casos se trata de un capricho del dueño de la casa (puerta) o del herrero que las fabricó. Podría decirse que el fin práctico queda superado por el decorativo.


El material de la bocallave es de hierro en forma de fina chapa bien aplanada. El ojo, reproduce exactamente la forma de las guardas de la llave y se sitúa en el centro de la pieza o en su eje central.


Las hay geométricas: rectas o curvas, ovaladas, circulares, cuadrangulares, romboidales, triangulares, poligonales; con filigranas, sol, estrellas, medias lunas y motivos vegetales (de procedencia barroca), como la flor de lis; con forma de jarrón, sencillo o doble, u otros recipientes; con forma de animales, águilas bicéfalas explayadas coronadas (características de la heráldica); de corazón; de objetos determinados (campana, llave, cruz); e incluso de letras del alfabeto.  


De entre las bocallaves que he encontrado en un recorrido completo (s.e.u.o) por toda la localidad de Cabra, muy pocas por cierto, pues van desapareciendo, destacaré exclusivamente tres de ellas, por las particularidades que reflejo a continuación. El resto (algunas de ellas las he recogido en la imagen correspondiente), bien conservadas la mayoría, se encuentran dentro de la clasificación antes expuesta: cuadrangulares, romboidales, ovaladas, flor de lis, jarrones, águilas bicéfalas y filigranas.

-      La parroquia de Ntra. Sra. de los Remedios (conocida como la Soledad), cuya portada está fechada en 1729, consta de una puerta de dos hojas, tachonada de clavos de forja en cabeza de diamante y en cada una de las hojas se encuentra una bocallave de corazón de María con los siete puñales y arriba el fuego relacionado con la acción de Dios que ilumina, arde, purifica, revela y conduce.


-   La puerta de la casa número 15 de la calle Alonso Uclés, donde vivieran don Manuel Mora Mozorriaga y esposa, cuenta con cinco líneas de tachonado de clavos redondeados dorados y cinco parejas de clavos a modo de botonadura, intercalados entre las líneas y como bocallaves, una practicable y la otra no, aparecen dos letras iguales, precisamente las del nombre y apellido o de los dos apellidos, esto es dos “M”. 

El número 5 de la calle Juan Carandell, conocida como calle “Las Parras”, actualmente una casa particular, fue hasta principios del siglo pasado una casa vecinal, según cuentan algunas personas que además nacieron en la misma. Los orígenes de esta casa cuya portada es de las más interesantes de Cabra, por su factura arquitectónica y  heráldica, no se pueden determinar en el tiempo inicial. Parece cierto según indican determinadas notas encontradas en internet, que los escudos pueden corresponder a la familia Luque Texeiro o Tejeiro que llegaron a Cabra a finales del siglo XVIII, si bien el escudo de la izquierda, según piedra armera relaciona a los Carrillo, Figueroa y Caracuel Vilchez, hidalgos igualmente de Cabra. En la cartela del escudo central se encuentra la fecha de esta portada, 1787. La puerta tiene siete líneas de tachonado con clavos redondeados negros y siete grupos dispares de clavos a modo de botonadura, intercalados entre las líneas. La bocallave es la más interesante,  única en su género, incluso quizá en muchos Kms. a la redonda. Habría que irse a poblaciones del interior castellanas o del bajo Aragón (Albarracín)

para encontrar algo semejante. Esta bocallave ha sido el motivo principal de esta colaboración pues desde el primer momento me tiene totalmente cautivo. Se trata, de una doble bocallave cuyos elementos realmente son tres: campana, llaves cruzadas y corazón. Después de consultar determinados estudios en busca de la simbología que pueda presentar esta particularísima bocallave, me encontramos con lo siguiente: las llaves cruzadas podrían simbolizar la autoridad que alguien tiene para custodiar los bienes de algún Rey o príncipe, pudiéndose tratar de un mayordomo, primer ministro, tesorero o vicario de una casa real; son igualmente el símbolo del papado, autoridad que custodia la fe de Cristo. Respecto a la simbología de la campana podría tratarse de algo más prosaico o poético pero también en relación con la fe pues por su sonido se asocia al poder Creador, a la voz de Dios como el Verbo Creador. Una campana en sentido inverso (no es el caso) nos conduce al Cáliz o Santo Grial. También se halla asociada la simbología de la campana a lo cósmico por la forma de la “bóveda” y por la vibración al sonar y ser percibido por todo cuerpo, se infiere un uso terapéutico. El corazón además de simbolizar el motor de la vida se vincula también con el Sagrado Corazón de Jesús. Pero esta puerta además tiene dos picaportes, llamadores o aldabas, zooformes, que son lagartos, cuya simbología colocados en las puertas es la de ofrecer protección, considerado el lagarto como un animal benéfico. Todas estas apreciaciones, personales, tras las notas estudiadas, ofrecen sin duda muchas cuestiones sobre la familia que tuviera a bien pedirle a un herrero que colocara estos elementos: ¿Cuál era o eran las causas? ¿qué empleo o a qué gremio pertenecían los dueños? ¿pudo ser en sus orígenes un edificio de carácter religioso? Seguro que yerro en tamaña apreciación pero aquí quedan las preguntas y otras más que se podrían plantear. Por cierto, si alguien tiene o conoce la solución a estos enigmas, que a lo mejor no son tales, agradecería me saquen de dudas si a bien lo tienen.


Para finalizar, una denuncia. En los últimos meses, los amigos de lo ajeno, desaprensivos escudados a lo peor en la necesidad como excusa a sus fechorías, están despojando las puertas de nuestra localidad, en su mayor parte por el centro, de tiradores, pomos y todos aquellos herrajes que se puedan desprender. Desde estas líneas mi reproche a tales actos delictivos, confiando en que sean descubiertos por la autoridad y castigados debidamente con arreglo a justicia y repuestos aquellos elementos en las puertas de nuestra localidad para disfrute de todo el que mira las calles con espíritu de quien visita el mejor de los museos.

 

Algunos enlaces de internet consultados:

http://natrural.blogspot.com/2018/02/sabes-que-son-las-bocallaves.html


https://www.pikview.com/bocallave


https://eescriche.es.tl/HISTORIA-DE-LA-CERRAJER%CDA.htm


https://www.pinterest.com.mx/suspensionesmol/cerradurasbocallavesperillasmanijas-y-picaportes-a/?lp=true


https://definicion.de/cerradura/


https://es.wikipedia.org/wiki/Cerradura


http://www.aspur.org/docs/LAS_CAMPANAS.pdf    


https://www.pinterest.es/joseluisjos6636/llamadores-tiradores-aldabas-y-balancines/?lp=true 


http://www.instahu.com/tag/bocallave                                                                                       

ICONOGRAFIA POPULAR: LAS BOCALLAVES MARTIN CRIADO, Arturo. Año 2002- Revista de Folklore nº 264                                                                                                            

No hay comentarios:

Publicar un comentario