A MI MANERA
El pajarito que todo envidiaba
Una vez, un pajarito estaba muy furioso por un problema, que envidiaba a
todo el que tenía algo que presumir. Envidiaba las habilidades de construcción
de la arañita Penélope, las garras del águila Tomás, la rapidez del leopardo
Rodolfo…
Un día decidió ir a buscar a su amiga Penélope y le pregunto:
-¿Oye, cómo conseguiste esa habilidad para construir tantas casas?
-Ella le dijo: «pues trabajé mucho en ello, primero comencé por aprender a construir y poco a poco logré ir avanzando hasta construir estás maravillosas casas».
-Él le volvió a preguntar ¿Y no hay alguna forma de que tú, mi gran amiga, me enseñes a construir como tú?
La araña Penélope le contestó:
-Sí pero tardarás mucho tiempo en poder construir como yo.
-¿Y no hay una forma de poder aprender a construir mucho más rápido? Dijo el pajarito.
-¡No, si quieres aprender a construir tardarás mucho tiempo!. Contestó enfadada Penélope
El pajarito enfadado con su amiga Penélope se fue en busca de su amigo Tomás el águila. Cuando llegó a su nido le preguntó al águila.
-¿Oye tú cómo tienes esa habilidad de poder cazar tan fácil con tus garras?
-Pues con las garras ya nací pero la habilidad de aprender a usarlas y
poder cazar con ellas fue muy difícil para mí ya que fue por mi instinto por
quien pude desarrollar esta habilidad. Contestó el águila.
-Y dime, ¿Hay alguna manera rápida de poder aprender a cazar?. Dijo el pájaro
-Jajajaja», carcajeó el águila ¿Tú, cazar? Para poder cazar tendrías que ser un animal grande, listo, veloz como yo. Le dijo el águila al pájaro en tono de burla.
El pájaro enfadado fue a darse una vuelta para desahogarse, cuando se acordó de que había oído hablar sobre una vidente mantis, así que fue a verla para poder pedirle un consejo para obtener todas las habilidades que él quisiera sin tener que hacer ningún esfuerzo. Cuando llegó le dijo a la mantis:
-¿Me podrías dar una forma para poder aprender todas las habilidades que yo quiera sin hacer ningún esfuerzo?
-Está noche hay luna llena. Dijo la mantis
-Y qué pasa con eso. Le respondió el pájaro
Cada vez que hay luna llena se le puede pedir un deseo a la luna pero ella te quitará algo al azar? Le dijo al pájaro con tono misterioso.
-¿Que me quitará?. Dijo el pajarito asustado
-No se sabe pero siempre quita algo único y muy importante. Dijo la mantis
Y el pájaro un poco asustado le dijo a la mantis:
- pues está misma noche lo haré al lado del lago ya que allí se ve muy bien la luna.
Al caer la noche el pájaro de acercó al lago y tras un largo silencio el
pajarito le pregunto a la luna:
-¿Que tengo que hacer para poder tener la habilidad de la arañita Penélope, del águila Tomás…? Preguntó el pájaro un poco asustado.
-Abrázame en mi reflejo del lago. Le respondió la luna
El pájaro tras el hechizo de hipnosis de la luna se echó al agua y ahí se dio cuenta de lo que le había quitado la luna, él no sabía nadar.
Moraleja: si algo quieres lograr, en ello deberás trabajar.
FIN
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