Carmen Serrrano Jurado

 

LA INTELIGENCIA

La inteligencia la define la Real Academia Española como la capacidad de entender o comprender y de resolver problemas , por lo que en esta definición se incluye el entendimiento, intelecto, talento, raciocinio, conocimiento, ingenio, perspicacia, cabeza, razón … por lo que es un conjunto de habilidades cognitivas y conductuales que permite la adaptación eficiente al ambiente físico y social.

La teoría de las inteligencias múltiples (IM) postula que la inteligencia humana no es una única habilidad general sino que comprende varias modalidades distintas, como:

• La inteligencia lingüística: capacidad para usar el lenguaje de forma eficaz, tanto en la escritura como en el habla.
• La inteligencia lógica-matemática: habilidad para razonar lógicamente, resolver problemas matemáticos y encontrar patrones.
• La inteligencia musical: capacidad para percibir, crear y expresarse con formas musicales, ritmo y melodías.
• La inteligencia espacial: habilidad para percibir el mundo visual y espacialmente y transformarlo, así como la capacidad de visualización mental.
• Inteligencia corporal cenestésica: habilidad para usar el cuerpo para expresar ideas y sentimientos y para coordinar los movimientos con precisión.
• Inteligencia intrapersonal: habilidad para comprenderse a uno mismo, incluyendo los propios sentimientos, pensamientos y motivaciones.
• Inteligencia naturalista: sensibilidad hacia el mundo natural, con capacidad para identificar y clasificar elementos de la naturaleza como plantas y animales.

Según la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, cada persona tiene una combinación única de estas inteligencias, que se manifiesta en habilidades distintas como la facilidad para el lenguaje, la resolución de problemas, la percepción espacial, la sensibilidad, la música, la destreza física, la comprensión de los demás, el autoconocimiento y la conexión con la naturaleza.

Existen otros tipos de inteligencias cuya clasificación incluye:

• Inteligencia emocional: habilidad para reconocer y manejar las emociones propias y las de los demás.
• Inteligencia creativa: capacidad para generar ideas innovadoras y soluciones originales.
• Inteligencia existencial: habilidad para reflexionar sobre las preguntas fundamentales de la existencia.

Sin duda alguna, la más importante es la inteligencia lingüística o verbal, ya que se utilizan los dos hemisferios del cerebro. Quienes poseen este tipo de inteligencia tienen la habilidad de utilizarla con dominio avanzado en lenguaje oral y escrito.

Popularmente, una persona inteligente es quien encuentra luz en un túnel o una salida en un laberinto, es decir, una persona que en condiciones totalmente desfavorables supera las situaciones, rema contracorriente y con olas de gran altura, que aunque se caiga se pone de pie y vuelve a intentarlo hasta que lo consigue y no se deja intimidar por nada ni nadie, que se enfrenta a dificultades que dan miedo; en definitiva, una persona valiente.